en la Institución
Por: Anónimo
Las Barras Bravas son grupos conformados por jóvenes que se reúnen semanalmente en diferentes lugares. Estos grupos representan a los equipos de fútbol del país y su misión es “defender sus colores y su pasión”. Muchos jóvenes aún no reconocen al fútbol como un juego en que suele haber un triunfador y un derrotado.
Sus integrantes actúan de forma violenta contra jóvenes hinchas de otros equipos, sin pensar en la forma como perjudican al otro, llegando a acabar sus sueños e ilusiones de una forma absurda, sin pensar que por un equipo o por una pasión podrían perder la vida.
Estos grupos solamente piensan en causar daño a los demás. Suelen alentar a su equipo, pero no sólo lo acompañan en sus derrotas y victorias, sino que en ocasiones se exaltan y llegan a agredirse entre sí.
Nos llama la atención la forma como se organiza una “barra”, el entusiasmo y las ganas que muestra cada joven en la tribuna al acompañar a su equipo, alentándolo con sus cantos, mostrando sus alegrías, emociones y tristezas, exhibiendo sus trapos, camisetas y cantando arengas. Lamentablemente, tras una derrota los chicos no la saben asimilar y se desencadenan episodios de disturbios y violencia.
Debemos entender que nada se hará en la forma que esperamos. Alentar a nuestro equipo sanamente -sin causar daño a otros- es posible. Debemos entender que todas las derrotas no se pueden solucionar con pleitos, que son un motivo para ser mejorar y superar los errores cometidos en el juego. La mejor forma de afrontar las derrotas es disfrutar de cada triunfo.
¿Cómo influyen las barras en la Institución?
El fenómeno de las barras bravas influye en el colegio en la medida en que los estudiantes, quienes hacen parte de estos grupos, se sienten populares, creen obtener respeto y una vaga sensación de superioridad. Les gusta llamar la atención de quienes los rodean.
Las barras influyen en sus integrantes, caracterizados por falta de personalidad y por querer ser más que el otro; así creen tener el derecho de causar daño, escudados en la seguridad que les otorga pertenecer a un grupo de jóvenes.
Anteriormente, se solía escuchar que en los alrededores de la institución se presentaban riñas entre estudiantes del colegio Próspero Pinzón y colegios cercanos como La Amistad, El Japón y el INEM, entre otros. Los estudiantes buscaban nuestra institución para generar problemas de intolerancia entre las distintas barras, por el simple hecho de ser diferentes. En ocasiones se peleaban de tal forma que se lastimaban sin pensar en el sufrimiento de sus padres y demás familiares, como si la vida se pudiera comprar en cualquier tienda o establecimiento.
¿Por qué no podemos utilizar camisetas de diferentes equipos dentro de la institución?
Quizá cada uno de nosotros se ha hecho esta pregunta, que aparentemente no tiene respuesta. Siempre estamos cuestionando a los maestros sin analizar nuestras actitudes irresponsables, por agredir a otra persona que usa una camiseta o algún elemento que represente a un equipo distinto, sin respetar sus principios ni virtudes, su forma de ser, de pensar, a la vez que se ignoran sus preferencias y diferencias
Por: Anónimo
Las Barras Bravas son grupos conformados por jóvenes que se reúnen semanalmente en diferentes lugares. Estos grupos representan a los equipos de fútbol del país y su misión es “defender sus colores y su pasión”. Muchos jóvenes aún no reconocen al fútbol como un juego en que suele haber un triunfador y un derrotado.
Sus integrantes actúan de forma violenta contra jóvenes hinchas de otros equipos, sin pensar en la forma como perjudican al otro, llegando a acabar sus sueños e ilusiones de una forma absurda, sin pensar que por un equipo o por una pasión podrían perder la vida.
Estos grupos solamente piensan en causar daño a los demás. Suelen alentar a su equipo, pero no sólo lo acompañan en sus derrotas y victorias, sino que en ocasiones se exaltan y llegan a agredirse entre sí.
Nos llama la atención la forma como se organiza una “barra”, el entusiasmo y las ganas que muestra cada joven en la tribuna al acompañar a su equipo, alentándolo con sus cantos, mostrando sus alegrías, emociones y tristezas, exhibiendo sus trapos, camisetas y cantando arengas. Lamentablemente, tras una derrota los chicos no la saben asimilar y se desencadenan episodios de disturbios y violencia.
Debemos entender que nada se hará en la forma que esperamos. Alentar a nuestro equipo sanamente -sin causar daño a otros- es posible. Debemos entender que todas las derrotas no se pueden solucionar con pleitos, que son un motivo para ser mejorar y superar los errores cometidos en el juego. La mejor forma de afrontar las derrotas es disfrutar de cada triunfo.
¿Cómo influyen las barras en la Institución?
El fenómeno de las barras bravas influye en el colegio en la medida en que los estudiantes, quienes hacen parte de estos grupos, se sienten populares, creen obtener respeto y una vaga sensación de superioridad. Les gusta llamar la atención de quienes los rodean.
Las barras influyen en sus integrantes, caracterizados por falta de personalidad y por querer ser más que el otro; así creen tener el derecho de causar daño, escudados en la seguridad que les otorga pertenecer a un grupo de jóvenes.
Anteriormente, se solía escuchar que en los alrededores de la institución se presentaban riñas entre estudiantes del colegio Próspero Pinzón y colegios cercanos como La Amistad, El Japón y el INEM, entre otros. Los estudiantes buscaban nuestra institución para generar problemas de intolerancia entre las distintas barras, por el simple hecho de ser diferentes. En ocasiones se peleaban de tal forma que se lastimaban sin pensar en el sufrimiento de sus padres y demás familiares, como si la vida se pudiera comprar en cualquier tienda o establecimiento.
¿Por qué no podemos utilizar camisetas de diferentes equipos dentro de la institución?
Quizá cada uno de nosotros se ha hecho esta pregunta, que aparentemente no tiene respuesta. Siempre estamos cuestionando a los maestros sin analizar nuestras actitudes irresponsables, por agredir a otra persona que usa una camiseta o algún elemento que represente a un equipo distinto, sin respetar sus principios ni virtudes, su forma de ser, de pensar, a la vez que se ignoran sus preferencias y diferencias
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